ESCRITORES OFICIALES BIPARTIDARIOS

Los bipartidarios lo ocupan todo. Y no podía faltar el frente de la curtura, o como ellos dicen, cultura. Y el de las escribanías diversas. Así tienen poetas, escritores de cartas, novelistas históricos, ensayistas de la memoria histórica, y , en fin, todo lo que se puede hacer en el amplio campo de lo escrito y publicado, que pa eso están sus editoriales, bien las oficiales o las interperpuestas privadas, que se lucran con la prebenda desde le institución, facilitándole la venta de libro escolar u otra cosilla... Que hoy son las urnas quienes dirimen quien es escritor y su valía. Todo mu democrático, sí señor, como el orden manda y el esclavo obedece...

Pos lo mismo que tú, so pringao, lo mismito que tú, un plumífero feraz, un cantamañanas, un escritorzuelo del anzuelo, una ricura es Aznar con su literatura. Que Aznar escriba cartas es lo mismo que algunos poetas lo sean, incluso inventando sonetos cojonudos, o sea con estrambote asaz original y admirativo. Gente (micer Aznar y el poeta biparcial) que se aúpan al estrellato de la escribanía por sus méritos políticos, y al arrimo del carro de mando y tentetieso, al arrimo del poder de mandamases, que no otro valor tienen los payos sino el que emana de las urnas, ese fato repelente si no es para servir a todos, en la re publica (asunto público) calladamente.

Lo que admira es que se critiquen estos bipartidarios pariguales. ¿Será para darse cancha y promoción, para darse pisto y pasto, o que estamos en precampaña electorera y cada uno quiere que su parte bipartidaria triunfe con la ganancia valorada en papeletas? Quien considera oficio la escritura no es escritor sino escribano, plumífero, calamero, plumilla, pendolista, escribiente, pasante, tagarote, chupatintas que las caga…

Nada personal. Pero hay que atizar en todos los frentes de mando, que hoy dominan y vejan a los extremeños cabales desde la cochambre y la caspa de las instituciones junteras, utilizadas, con sobrados dineros malempleados de la UE, como instrumentos al servicio de Gallardo (es un símbolo), para enriquecimiento perverso personal, para caciquismo atroz, parámetro y lucro sin tasa. Y sobre todo por el proyecto refinero torpe que maquinan. Y en eso los poetas poltroneros callan como putas, nunca mejor dicho. Si quieren ser algo a la antigua usanza.

Incluso tan vendidos están, cornudos y contentos, que mienten como bellacos, y llegan a decir, véanse las antañonas confesiones del Ibarra, que eso del cambio climático es mentira, ¡con la que está cayendo!, mucho antes que Rajoy…

Y tiene sus poetas, sus enterados de la cosa literaria, sus expertos maestros en enseñarnos lo debido, lo correcto, lo válido en la cortesanía poética, sus oportunistas del medro…

¡Y un chupe, don Álvaro, un chupete cebollón para vos!